La unidad de Terapia Familiar del Hospital de Sant Pau en Barcelona aborda el trastorno mental grave desde una óptica sistémica. Desde ese punto de vista el trastorno cumple una función dentro de la familia. Cuando el terapeuta adopta este punto de vista, todos los miembros de la familia tienen una misión que cumplir y el peso de la etiqueta deja de ser llevado por el ?paciente identificado?. Se requiere un cambio en todos los miembros de la familia para producir una modificación en el síntoma que trae a la familia al servicio. En el caso que describimos ha habido además una colaboración con terapeutas del Grupo Palo Alto, de Palo Alto, California.